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Por: Angelina Herrera/ periodista Informativo El Morro
La Asamblea Departamental del Magdalena enfrenta un ambiente de tensión política y disputas legales que han puesto en duda la estabilidad de la corporación. En los últimos meses, se han presentado demandas y recursos que evidencian un profundo conflicto entre sus miembros.
Uno de los hechos más recientes gira en torno a la diputada María Margarita Guerra Zúñiga, quien impugnó la elección de la mesa directiva para el periodo 2025, argumentando que el proceso estuvo lleno de irregularidades. Su solicitud ante el Tribunal Administrativo del Magdalena busca anular la elección y, como medida provisional, suspender los efectos de la designación mientras se estudia el caso.
Sin embargo, Guerra Zúñiga también se encuentra en el centro de otra controversia. En su contra, se interpuso una demanda de pérdida de investidura por presunta violación al régimen de inhabilidades. La acusación sostiene que la diputada suscribió un contrato con la Gobernación del Magdalena en 2022 y, posteriormente, ocupó el cargo de Secretaria General en la Asamblea en 2024, lo que podría contravenir normas de incompatibilidad.
Estos conflictos han generado preocupación sobre el impacto que tienen en la operatividad de la Asamblea, en un momento en el que el departamento requiere estabilidad política y una gestión legislativa eficiente. La resolución de estos procesos legales será clave para definir el rumbo de la corporación y el equilibrio de poderes en el Magdalena.
